10 semanas de embarazo: Calendario semanal
El desarrollo de su bebé a las 10 semanas
¿Cuánto pesa y mide mi bebé a las 10 semanas?
Durante la décima semana de embarazo, su bebé crece con rapidez cada día. A las 10 semanas, los bebés tienen aproximadamente el tamaño de una fresa, miden unos 3,2 cm (1,3 pulgadas) de largo y pesan unos 35 g (1,2 onzas). Su bebé también se mueve. Probablemente aún no puedas sentir los movimientos, pero podrías verlos en la ecografía.
Hitos de desarrollo a las 10 semanas
En la décima semana de embarazo, se producen cambios tanto en el interior como en el exterior del cuerpo del bebé. Los órganos vitales se han formado y comienzan a funcionar en conjunto. Los dedos de las manos y de los pies del bebé se separan. Los brotes dentarios comienzan a formarse.
La mandíbula está formando lo que se convertirá en esa adorable carita de bebé. También se comienzan a formar otros huesos. Las células de los huesos del bebé comienzan a reemplazar el cartílago más blando.
Este momento marca el final del período embrionario; en general, el embrión ahora tiene una apariencia claramente humana. A partir de la próxima semana, su bebé será considerado oficialmente un feto

Su cuerpo a las 10 semanas de embarazo
Síntomas de embarazo a las 10 semanas
Si ha tenido náuseas matutinas, es posible que ahora estén disminuyendo, pero en algunas mujeres, continúan durante todo el primer trimestre. Es normal subir un poco de peso, y es posible que la ropa interior pueda quedarle apretada. La ropa holgada (pantalones con cintura elástica y camisetas holgadas, o incluso ropa de maternidad) puede resultarle más cómoda.
A las 10 semanas de embarazo, también es normal tener:
- fatiga (cansancio extremo)
- más flujo vaginal de lo habitual
- venas que se vuelven más visibles, como en las piernas o los tobillos
- náuseas por las mañanas y acidez estomacal
- gases, hinchazón y estreñimiento
- antojos y aversiones a la comida (fuerte aversión a ciertos alimentos, a veces hasta el punto de sentir náuseas)
Citas importantes a las 10 semanas
Una buena atención prenatal es crucial para su salud y la de su bebé. Si aún no ha ido al médico, programe las primeras visitas prenatales.
Es posible que si se considera que su embarazo es de alto riesgo (por ejemplo, tiene más de 35 años de edad o tiene antecedentes de complicaciones en un embarazo), el médico desee verla cuanto antes o con más frecuencia durante el transcurso del embarazo.
¿Qué puedo esperar en mi primera visita prenatal?
En su primera visita prenatal, el médico o el personal de enfermería confirmarán que está embarazada y calcularán su fecha probable de parto (cuándo podría nacer su bebé). Esto se basa en la fecha del último período (menstruación). A veces, una ecografía prenatal (una prueba en la que se usan ondas sonoras para recrear una imagen del bebé) puede ayudar a determinar la fecha probable de parto.
El médico hará una exploración física para comprobar su salud y tal vez desee hacer exámenes prenatales. En los exámenes prenatales se controla su salud y la de su bebé. Algunos son exámenes de cribado que solo indican la posibilidad de que exista un problema. Otros son exámenes de diagnóstico que permiten saber si su bebé tiene un problema determinado.
En su primera cita, el médico también hará lo siguiente:
- conversar sobre sus antecedentes médicos
- hacer recomendaciones sobre vitaminas prenatales, estilo de vida y nutrición
- establecer un plan de atención prenatal
- abordar sus preguntas y preocupaciones
Análisis de sangre comunes alrededor de las 10 semanas
Durante el embarazo, se ofrecen análisis de laboratorio prenatales (como los análisis de sangre) durante el primer trimestre (de la semana 1 a la 12), el segundo trimestre (de la semana 13 a la 27) y el tercer trimestre (de la semana 28 a la 40).
Su médico probablemente le indicará que se haga un análisis de sangre para determinar si está vacunada contra la varicela y la rubéola, así como para determinar su grupo sanguíneo y factor Rh. También podrían hacerle pruebas para detectar ciertas infecciones, como la sífilis o la hepatitis B, y podrían ofrecerle una prueba del VIH.
Es posible que también se hagan análisis de sangre para detectar ciertos trastornos genéticos. El tipo de pruebas que se pidan dependerá de su situación y preferencias.
Reviewed by: Larissa Hirsch, MD
Date Reviewed: Jul 10, 2025



