Una férula es un dispositivo de sujeción hecho con material rígido, que mantiene inmóvil una zona lesionada.
Las férulas pueden ser de plástico, metal, yeso o fibra de vidrio. El material puede venir prefabricado y ser de tallas diferentes o bien puede ser moldeable y hecho a medida. Las férulas pueden estar formadas por una pieza o por varias.
Las férulas mantienen los huesos y las articulaciones en sitio para que se puedan curar después de que se rompa un hueso (fractura ósea), una lesión o una operación. Las férulas también pueden resultar útiles para las afecciones de las articulaciones (como la artritis) o los músculos (como las parálisis, que van desde la debilidad a la inmovilidad muscular).
Los médicos usan férulas para las fracturas cuando la zona que rodea la lesión está hinchada o inflamada. Cuando hay inflamación, las férulas son una mejor opción que las escayolas porque, si es necesario, se pueden aflojar fácilmente.
Una vez cede la inflamación, los profesionales de la salud suelen sustituir las férulas por escayolas. Las escayolas ofrecen una mayor protección mientras se cura un hueso fracturado.
Si el médico te dice que te dejes la férula puesta mientras te bañas, asegúrate de que no se moje.
Para mantener la férula seca durante el baño:
Llama al médico si:
Cuida de la férula para que se mantenga en buenas condiciones y no te provoque irritación. Pronto, estarás participando nuevamente de tus actividades habituales.
Reviewed by: Amy W. Anzilotti, MD
Date Reviewed: Mar 1, 2023
By using this site, you consent to our use of cookies. To learn more, read our privacy policy.