El hipospadias se produce cuando la uretra, el conducto por el que la orina procedente de la vejiga sale del cuerpo, se abre en un lugar distinto en vez de hacerlo en la punta del pene. La abertura puede estar en la parte inferior del pene o en su base.
Los niños con hipospadias presentan uno o más de los siguientes signos:
El lugar donde se abre la uretra es lo que determina si el hipospadias dará problemas. Por ejemplo, una abertura que está:
El encordamiento puede dar o no problemas, dependiendo de la curvatura del pene:
Los médicos no saben exactamente cuál es la causa del hipospadias. A veces, se da por familias. Los niños con ciertas afecciones genéticas son más propensos a tener hipospadias. Los bebés prematuros también son más proclives a esta afección.
Normalmente, el médico detecta el hipospadias durante la primera revisión del bebé después del parto. A veces, se detecta durante una de las revisiones periódicas. Otras veces, uno de los progenitores lo ve cuando la orina de su bebé sale por un lugar distinto al habitual.
La mayoría de las veces, los médicos reparan el hipospadias a través de una operación. Algunos casos leves pueden no requerir cirugía.
Dependiendo de en qué lugar del pene se abra la uretra y de si el niño tenga o no encordamiento, un urólogo pediátrico (un cirujano especializado en problemas urinarios en los niños) podrá hacer los siguiente:
Es posible que los padres tengan que esperar a que el hipospadias esté reparado antes de circuncidar (extraer el prepucio del pene) a su hijo. Los cirujanos suelen utilizar el prepucio para reparar los hipospadias.
Hable con el urólogo pediátrico cuando decida si quiere o no circuncidar a su hijo. Puede ser importante dejar el prepucio en su sitio para poderlo utilizar más adelante en la reparación del hipospadias.
Reviewed by: T. Ernesto Figueroa, MD
Date Reviewed: Aug 10, 2019
