Qué deben saber los educadores

Beber alcohol durante el embarazo puede causar anomalías congénitas en los bebés, así como problemas en su crecimiento y desarrollo. Los bebés que se exponen al alcohol cuando están dentro del vientre materno pueden desarrollar el síndrome de alcoholismo fetal (SAF). 

Entendiendo cuáles son sus dificultades y apoyándolos en sus necesidades, los educadores pueden ayudar a los alumnos con este síndrome a dar lo mejor de sí mismos en la escuela.

Retos para los alumnos con síndrome de alcoholismo fetal

Los niños con síndrome de alcoholismo fetal pueden tener:

• problemas relacionados con la memoria, la comprensión y la concentración
• problemas neurológicos, como falta de equilibrio/coordinación y convulsiones 
• hiperactividad, impulsividad y otros problemas de comportamiento
• problemas para relacionarse con otros alumnos y riesgo de recibir acoso escolar
• problemas en la vista y en la audición

Qué pueden hacer los educadores

Hable con su alumno y sus padres sobre instrucciones especiales, como por ejemplo si el alumno: 

• necesita sentarse delante en clase debido a sus problemas auditivos y/o visuales
• necesita tomar medicamentos durante el día
• tendrá que faltar a clase y llevar a cabo tareas escolares porque ha faltado a clase debido a sus visitas médicas
• necesita un programa de educación individualizada (IEP) o un plan de educación 504
• necesita logopedia, terapia ocupacional o fisioterapia, si están disponibles en la escuela

Los alumnos con síndrome de alcoholismo fetal rinden mejor en ambientes estructurados y con rutinas diarias consistentes. Usted puede ayudar a estos alumnos:

• presentándoles información clara y en fragmentos breves y accesibles
• reduciendo las distracciones que haya dentro del aula
• usando materiales visuales
• anunciando los cambios de horario y las transiciones con tiempo de antelación 
• usando grupos reducidos cuando sea posible

Otros aspectos importantes: 

• Encontrar la mejor estrategia para un alumno con síndrome de alcoholismo fetal puede llevar tiempo. Valorando los puntos fuertes de cada alumno con síndrome de alcoholismo fetal, felicitándolo por su esfuerzo y proporcionándole un ambiente de apoyo, podrá hacer grandes cosas para que de lo máximo de sí mismo en la escuela.
• Favorezca un aula acogedora que enseñe a los alumnos a tratar a los demás con respeto y amabilidad. 
• Ayude a su alumno con síndrome de alcoholismo fetal a confiar en sí mismo, reconociendo y valorando sus puntos fuertes: en matemáticas, el deporte, el teatro, el arte o cualquier otra disciplina que le guste. 
• Apóyelo. Si cree que su alumno está preocupado o angustiado, hable con él y con su familia sobre las opciones de orientación y asesoramiento disponibles en la escuela o en la comunidad. Algunos distritos escolares no requieren el permiso de los padres para que un alumno vea a un orientador en su escuela, mientras que hay otros que sí. Consulte la normativa de su distrito escolar.