Ya hemos convivido con el coronavirus (COVID-19) por un tiempo y hemos aprendido mucho sobre el virus y cómo protegernos de él. Las medidas más importantes son las siguientes:
Tanto los adultos como los niños pueden infectarse. En los niños, el virus a veces puede provocar una enfermedad leve y, con frecuencia, no causa ningún síntoma. Pero algunos bebés y niños se han enfermado mucho a causa del virus; en algunos casos, semanas después de haberse infectado. Y algunos niños incluso han muerto. Los niños menores de 2 años no pueden usar mascarillas y los menores de 6 meses no pueden vacunarse contra el COVID-19. Por lo tanto, es importante protegerlos de otras formas.
El coronavirus se puede contagiar cuando la gente respira, habla, tose o estornuda. Esto es cierto incluso para las personas que se sienten bien y no presentan síntomas; aún pueden estar infectadas y no saberlo. Cuando alguien usa una mascarilla, evita que el virus llegue a otras personas (en caso de que esta persona esté infectada) y también la protege de contraer el virus de otras personas. Aunque ya no se requiere usar mascarillas en la mayoría de los lugares públicos en los EE. UU., sigue siendo una buena idea que las personas las usen, especialmente en interiores o en lugares al aire libre muy concurridos si las personas:
Los requisitos sobre el uso de mascarillas pueden cambiar según la cantidad de casos de COVID-19 que haya en una comunidad especifica en un momento dado. En este momento, las personas siempre deben usar mascarillas en un entorno de atención médica, si tienen COVID-19 o si han estado expuestas a él.
Los bebés y los niños menores de dos años no deben usar mascarillas por los siguientes motivos:
Puede proteger a su pequeño evitando las grandes multitudes y manteniendo una distancia segura de otras personas cuando esté fuera de la casa.
Para ayudar a detener la propagación del virus:
Sí. Los consultorios médicos han tomado medidas durante la pandemia para mantener seguros a los pacientes. Entre estas medidas se incluyen las siguientes: hacer una limpieza profunda de manera regular, limitar la cantidad de personas en las salas de espera, hacer pruebas a las personas que entran en el edificio y obligar a usar mascarillas a todas las personas mayores de 2 años.
Cuando llame, pregúntele al personal qué están haciendo para mantener seguros a los pacientes para que usted pueda estar preparado. Por ejemplo, es posible que solo permitan la entrada de uno de los padres o cuidador para acompañar a su niño.
Manténgase en contacto con el médico de su hijo sobre los siguientes temas:
Llame al 911 de inmediato si su hijo tiene una emergencia médica. Entre los signos de una emergencia médica, se incluyen que un niño se ponga azul, que deje de respirar, que esté muy adormilado y le cueste mucho despertarlo, o que pierda la conciencia.
Reviewed by: Mark T. Ogino, MD, Elana Pearl Ben-Joseph, MD
Date Reviewed: Aug 20, 2022